El otoño huele a eucalipto, canela y bergamota, pero también a lavanda y cedro que alivian nuestro estrés, a menta y limón que nos calma y relaja o a naranja y clavo, perfectos para aumentar la inmunidad del organismo.
Cada aroma cumple una función determinada en el apasionante mundo de la aromaterapia, por ello los aceites esenciales se venden tanto en esta época del año y también en invierno, concentrando en pocas gotas toda la esencia de cada fruto o planta.
Pocas cosas hay más relajantes y apetecibles cuando llega el frío que un buen baño de sales de Epsom con unas gotitas de aceite esencial de romero, lavanda o rosas, según el gusto. Y es que los aceites esenciales nunca pasan de moda, ocurre como con los jabones y las velas, con tanta variedad de ingredientes y aromas que es difícil decidirse por uno.
La firma norteamericana BCL SPA cuenta este año con una novedad, su original formato en roll-on con una revolucionaria fórmula sin cera que los absorbe instantáneamente. En definitiva, remedios terapéuticos que mezclan los aceites esenciales y el aceite de coco, aprovechando los beneficios de la aromaterapia en prácticos envases de 10ml para disponer de ellos en cualquier lugar y momento del día, dada su comodidad de uso y de aplicación sobre la piel.
En España, distribuye BCL SPA la empresa California Dreaming. Karen Miller, su brand manager, nos comenta acerca de sus propiedades y lo que podemos esperar de cada uno de ellos: “Los aceites esenciales deben aplicarse sobre todo en sienes, muñecas o parte superior del cuello, donde son más efectivos y también en zonas que no toqueteemos mucho, por lo que es fácil que rápidamente hagan su función. El de lavanda y cedro, por ejemplo, te ayudará a sentirte más relajada, tranquila, sin tensiones.
El de menta y wintergreen, estimulará tu bienestar mental, así como el de menta y limón aliviará posibles dolores de cabeza.
Uno de los más demandados en estas fechas es el aceite esencial de naranja y clavo, que ayuda a aumentar la inmunidad del organismo, así como lo refuerza, haciendo que el metabolismo pueda funcionar de forma más eficiente”.
Además, existen muchos otros aromas -en otras marcas- para conseguir un sueño de calidad y dormir bien (los de jazmín, vetivert o mejorana), para el colapso mental (menta piperita, tomillo o albahaca) o incluso para levantar el ánimo si estamos decaídas (savia, patchouli, ciprés o árbol de té).
Lo importante es que sepas cuál es el más indicado para ti y tus necesidades: “También hay que tener en cuenta la estación en la que nos encontramos, en otoño el aire se reseca y nuestras fosas nasales lo notan, conviene por tanto ventilar nuestro espacio de trabajo y todas las estancias de la casa con regularidad, y después, ayudar a purificar el ambiente por medio de un aceite esencial de calidad” – concluye Karen Miller.